La economía sudafricana consiguió unas cifras de crecimiento remarcables en los últimos años, pero dicho crecimiento apenas alcanza a los grupos más pobres de la población. El índice de desempleo continúa alto y la desigualdad crece.
En la política nacional para el desarrollo económico los gobiernos descentralizados desempeñan un papel crucial. Deben crear un entorno que facilite la actividad económica a nivel local, para que más personas puedan aprovecharse del aumento de la prosperidad. Las competencias de los gobiernos locales no siempre son claras; además, les faltan conocimientos y experiencia.
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