Sudán del Sur es el estado más joven de África. Tras varios años de guerra civil la parte meridional de Sudán obtuvo la independencia en 2011. El nuevo país debe afrontar unos desafíos enormes. Hay mucha presión sobre la seguridad alimentaria y las instalaciones sanitarias para los ciudadanos son en gran parte inexistentes.

El gran retraso en estos campos obstaculiza el desarrollo económico y social. Debido al funcionamiento deficiente del aparato administrativo local, las ONG internacionales se encargan sobre todo de la prestación de servicios básicos para la población. Los gobiernos locales están ante el desafío de gradualmente responsabilizarse ellos mismos de esta labor.

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